OPINIÓN: Día de la Fonoaudiología

22 NOVIEMBRE 2025.- Director de Escuela, Miguel Vásquez Campos, se refiere a esta carrera, abierta en 2003 en la Universidad de Talca, “contribuyendo decisivamente al desarrollo regional y nacional de la disciplina”.

 

Cada 22 de noviembre se conmemora en Chile el Día de la Fonoaudiología, una disciplina cuya historia reciente da cuenta de un desarrollo sostenido y de una creciente complejidad profesional.

Su origen en la educación superior nacional se remonta a 1972, cuando la Universidad de Chile creó la primera carrera de Fonoaudiología en el país, estableciendo los cimientos para la formación científica y clínica de profesionales dedicados al estudio y la intervención de la comunicación humana, el lenguaje, el habla, la voz, la audición y la deglución.

Si bien ya había una experiencia 20 años antes, este inicio es el que más se considera. Aquella iniciativa pionera marcó el inicio de una trayectoria que, con el tiempo, se ha expandido a lo largo de todo el país, diversificando enfoques y fortaleciendo el desarrollo disciplinar, siempre orientado en el bienestar comunicativo de las personas.

En esta línea de crecimiento, la Universidad de Talca incorporó la carrera de Fonoaudiología en 2003, contribuyendo decisivamente al desarrollo regional y nacional de la disciplina.

A lo largo de más de dos décadas, el programa ha consolidado un proyecto formativo basado en la evidencia científica, la alta calidad de formación y el compromiso con la comunidad.

La vinculación con centros educativos, establecimientos de salud y organizaciones comunitarias ha permitido que cientos de estudiantes desarrollen competencias avanzadas, a la vez que se generan aportes concretos al territorio del Maule y a sus necesidades.

DESAFÍOS
Sin embargo, el desarrollo alcanzado no exime a la disciplina de enfrentar desafíos significativos. Entre ellos destaca la necesidad de fortalecer la investigación interdisciplinaria, que permita comprender fenómenos complejos como los trastornos comunicativos asociados a enfermedades neurodegenerativas, el impacto del envejecimiento demográfico, la salud vocal en contextos laborales exigentes y las brechas de acceso a servicios audiológicos de calidad.

Asimismo, la rápida transformación tecnológica exige a los fonoaudiólogos actualizar marcos éticos y competencias digitales para integrar herramientas de salud digital, de evaluación remota y dispositivos de apoyo comunicativo de última generación, sin perder de vista la centralidad y relevancia del vínculo terapéutico.

Otro desafío fundamental es ampliar la presencia de la fonoaudiología en políticas públicas, especialmente en salud primaria y educación.

Garantizar intervenciones tempranas, oportunas y basadas en evidencia sigue siendo una deuda estructural, particularmente en niños y niñas con dificultades del lenguaje y en personas mayores con trastornos de la comunicación frecuentemente subdiagnosticados.

La conmemoración del Día de la Fonoaudiología constituye, por tanto, una oportunidad para reconocer los avances logrados y, al mismo tiempo, proyectar con responsabilidad los próximos pasos.

El compromiso histórico iniciado en 1972 y continuado por instituciones como la Universidad de Talca, reafirma la importancia de seguir construyendo una disciplina robusta, socialmente pertinente y orientada al desarrollo integral de las personas y sus comunidades.

Miguel Vásquez Campos
Director
Escuela de Fonoaudiología
UTalca