Realidad y prevención del cáncer cérvico uterino en Chile
18 NOVIEMBRE 2025.- En Chile, el cáncer cervicouterino causa la muerte de cerca de 600 mujeres al año, dijo la profesora Mercedes Arenas. La principal causa es la infección de Virus del Papiloma Humano (VPH) que hoy puede prevenirse mediante vacunación.
El 17 de noviembre se conmemoró el Día Mundial de Acción para la Eliminación del Cáncer de Cuello Uterino, fecha de gran relevancia en nuestro país, ya que –como explicó la docente Mercedes Arenas Jara, de la Escuela de Obstetricia y Puericultura de la UTalca- esta enfermedad causa la muerte de cerca de 600 mujeres al año en Chile (aproximadamente dos al día).
Además, dijo, “hay alrededor de mil 500 nuevos casos diagnosticados anualmente. La principal causa es la infección por el Virus del Papiloma Humano (VPH) que hoy puede prevenirse mediante la vacunación contra el VPH, que se aplica a niños y niñas de cuarto básico) y se recomienda a todos los menores de 26 años”.
Con respecto a esto último, agregó que, junto a la vacunación, para prevenir es esencial realizarse controles periódicos (cada 3 años) con el examen de Papanicolaou (PAP), especialmente en mujeres de 25 a 65 años (gratis por Fonasa), que se puede complementar con la detección molecular del VPH”.
CAUSAS
Arenas recalcó que estos pasos preventivos son primordiales ya que “en la última década, Chile se ha posicionado en un lugar destacado a nivel mundial en la incidencia de este cáncer, debido al VPH y al inicio temprano de la actividad sexual, múltiples parejas sexuales, tabaquismo, VIH y sistemas inmunitarios debilitados”.
DETECCIÓN TEMPRANA
La docente recalcó que la detección precoz del VPH y de lesiones precancerosas aumenta las posibilidades de tratamiento y curación, por eso también es importante identificar algunos síntomas: En etapas avanzadas, pueden aparecer síntomas como sangrado vaginal anormal, secreción genital persistente o dolor durante las relaciones sexuales.
MATRONERÍA
En cuento al rol de matronas y matrones, Arenas explicó que es fundamental para la prevención, “abarcando la educación, la detección temprana a través del examen de Papanicolaou (PAP) o test de VPH, y la promoción de la vacunación contra el VPH”.
Además, “guían y apoyan a las mujeres en la identificación de factores de riesgo, la comprensión de las pruebas de detección y el cumplimiento de los controles, especialmente en grupos vulnerables”.
Informan qué es el VPH, aconsejan sobre hábitos como la alimentación saludable, evitar el tabaco y la importancia de usar preservativo en relaciones sexuales para prevenir el VPH y otras Infecciones de Transmisión Sexual (ITS), recolectan las muestras para el Papanicolaou (PAP) o test de VPH.
Además, agregó Arenas, matronas y matrones “orientan sobre los síntomas de alerta que deben ser motivo de consulta inmediata, y son clave en el seguimiento de los resultados de los exámenes y la indicación de los pasos a seguir, que pueden incluir la necesidad de una colposcopía u otros procedimientos.
Finalmente, explicó que la información y educación que realizan estos profesionales, también busca reducir brechas y llegar a poblaciones vulnerables, como mujeres con trabajos informales o difícil acceso a servicios de salud.
